Hola a todos, por fin estamos de vuelta. No es que nos hayamos ido pero hemos tenido que estar algo desconectados. ¿El motivo? Hemos reestructurado esta página web por completo por lo tanto tenemos alguna sorpresa preparada, en especial si eres fotógrafo de bodas. Bueno eso y que por suerte hemos tenido un volumen elevado de trabajo. Pero volvemos con el reportaje de boda de Eva e Isaac.

En «casa» del novio

Entrecomillo lo de casa ya que en esta ocasión las fotos a Isaac se desarrollaron en la habitación del Hotel Nazaries en Granada. Él y su familia residen en Marbella así que era esta la mejor opción. Día caluroso y de muchos nervios. Recuerdo, unos días antes, Isaac me pedía que por favor la sesión fotográfica con él no se extendiera demasiado. La habitación del hotel sería pequeña y especialmente me pedía algunos retratos con su familia. Dicho y hecho. Además, Eva se vestiría en la otra zona de Granada así que realizaríamos una sesión breve pero intensa.

En primer lugar, y condiciones normales los novios (ellos y ellas) suelen estar realmente nerviosos en el momento de comenzar con el reportaje de boda. En esta caso Isaac rompe la estadística. Tranquilo, muy tranquilo y participativo cosa que es de agradecer. Y mucho!! Teniendo en cuenta que la sesión sería corta decidimos hacerle unos primeros retratos a él para poco a poco ir incorporando a su familia. Unos últimas fotografías y a buscar a Eva.

Turno para ella

Finalmente estamos con Eva. Ella se visitó en el Palacio de Santa Inés ubicado en una calle cerca de la Acera del Darro. Un lugar precioso tanto el entorno como el palacio en si. Un rincón pequeñito pero muy acogedor. En esta ocasión la habitación era muy grande y la iluminación la proveniente a través de dos balcones laterales. Y allí estaba Eva. Guapa y radiante como dice la canción.

La sesión de este reportaje de boda transcurrió mucho más tranquila pues, además de estar también mayor tiempo, tan solo estábamos nosotros solos junto a sus padres y hermana. Unos primeros retratos a detalles del vestido para ir «rompiendo» esos nervios siempre puñeteros.

Las fotografías se realizaron tanto en el interior de la habitación como en alguna zona exterior a la misma y con la participación, como no podía ser de otra manera, de su familia siempre atenta y participativa también. Y tras unos últimos retratos a correr para el lugar de celebración. Si, también en la otra punta de Granada, jejeje.

Celebración

Boda civil en unos jardines maravillosos. Ceremonia emotiva como merecía la ocasión. Posteriormente una estupenda copa de bienvenida donde, ahora si, sin nervios ni tensiones propios de una boda pude fotografiar a los novios con sus familias y amigos dando paso a una cena íntima y un baile y jolgorio para diversión de todos los que por allí nos encontrábamos ese maravilloso día para todos. Yo incluido.

Por lo tanto, mi agradecimiento especial a esta pareja y familia por la acogida que durante todo el día me brindaron.

(NOTA: Se muestran sólo unas pocas fotografías)