Cuando una pareja de novios contratan a un fotógrafo de bodas su reportaje en formato álbum digital, bajo mi punto de vista deberían tener en cuenta varios aspecto importantes.

Para empezar, en un álbum de boda digital no debería haber un número exacto de fotografías a incluir, y si alguien lo ofrece, entonces es que bajo mi punto de vista ese álbum no se va a trabajar de forma independiente y seguramente se usarán plantillas de maquetación por lo que muy profesional no es, aunque paguemos por ello. Cada boda es distinta la una de la otra y por tal motivo debe trabajarse también de forma personalizada. Un álbum no es mejor cuantas más fotos tenga, si no cuanto mayor calidad tengan las fotos incluidas en el, aunque sean pocas. Yo prefiero una foto que refleje fielmente algún momento importante de ese día. Una foto que despierte algún tipo de sentimiento en aquella persona que la mira en vez de muchas fotografías apiladas sin sentido con poca chicha. Un álbum digital no es sinónimo a muchas fotos.

Hablábamos de la maquetación. Muchos fotógrafos de boda preferimos lo sencillo y elegante a lo “supermoderno” y estrafalario que pasará de moda seguramente en unos años. Como decía anteriormente, yo soy de los que no usan plantillas. Cada reportaje es distinto y cada fotografía merece un espacio exclusivo dentro de su reportaje de novios. Existen plantillas en los que los formatos de la misma no coinciden con la fotografía por lo que se deben hacer recortes indeseados que modifican por completo la imagen. ¿De que me serviría a mi editar (retocar) las fotografías una a una si luego los programas de maquetar las destrozan. Yo no trabajo así.

Y ya para finalizar, un álbum de boda digital es bueno o malo también por la calidad material e impresión del mismo. Sin merecer a ninguna firma que ofrece sus económicos álbumes por internet (gracias a plantillas), esos álbumes son más para reportajes de recuerdos familiares que para reportajes de boda.

En mi caso trabajo con un laboratorio profesional de fotografía ubicado en mi ciudad. Antes de encargar algún trabajo nuevo veo antes como va a ser y la calidad de los materiales. Si es cierto que pasan de dos a tres semanas desde que entrego el trabajo hasta que devuelven el álbum totalmente finalizado pero eso es lo que tiene el montaje a mano y tratamientos de los materiales exclusivos de los que se componen.

En definitiva, que un álbum de bodas digital es bueno o malo según diversos factores. Calidad de impresión y material; maquetación individual y elegante; y unas fotografías emotivas que describan el transcurso del día tal cual sucede. Para mi este sería un ejemplo de uno a tener en cuenta.

Y como no, en función de lo anterior, un álbum de bodas digital será también caro o barato.

En el siguiente enlace podemos ver también otro ejemplo de los álbumes que yo suelo incluir en mis reportajes de boda.

A continuación, unas muestras de álbum y maquetación.

album digital de boda
Portada. Ventana personalizada en sobre tapa.
álbum digital de calidad
Portada y Lomo. Tapa y sobre tapa color dorado.
álbum digital de calidad
Pieza contra portada.
álbum digital de calidad
Ventana central.

 

Ahora, unos ejemplos de maquetación llevados a cabo en algunos de mis últimos reportajes. El tamaño de cada página es de 35cm x 35cm por lo que cada lienzo (hoja) que veis aquí es de 35cm x 70cm al estar abierto.